Las Direcciones de Ventas Sur, Sureste y Península se unieron generosamente, aportaron su tiempo y sus recursos para reforestar, rehabilitar parques, escuelas, iglesias; prepararon alimentos y los llevaron a hospitales, oraron por la salud de los enfermos; también prepararon despensas y las entregaron a familias en necesidad.
No cabe duda que el espíritu del Corazón de Voluntario se contagia, porque también participaron compañeros de sucursales, de Yastás e incluso de Concrédito, lo cual reafirma que nuestra vocación de servicio es una forma de integrar más a los equipos.
Hoy queremos compartirles la historia de la Oficina Tierra Blanca, quienes se unieron para comprar croquetas, platos y correas para llevarlos a una comunidad que tiene por costumbre adoptar a perritos de la calle; además sumaron a una clienta de crédito individual que es veterinaria, quien estuvo desparasitando a los animalitos.
Reconocemos el entusiasmo de todos los voluntarios que hicieron una diferencia con sus acciones, ¡gracias por ser de los que ayudan!
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