En esta película nos adentramos en una historia donde nada es lo que parece. Lobo, Piraña, Serpiente, Tarántula y Tiburón, son cinco amigos que se dedican a... robar. Desde bolsos y carteras, hasta bancos y museos, estos personajes no se detienen por nada. Pero cuando los atrapan intentando robar una estatua, el Profesor Mermelada, un conejillo de indias muy peculiar, propone un experimento social en el que él será el guía de la pandilla para que "se vuelvan buenos", y así les perdonen todas sus fechorías.
¿Pero puede un tipo malo "volverse bueno"? Lobo, el líder, argumenta que él y su grupo se dedican a robar porque esa es su naturaleza, así nacieron, y porque las personas siempre los ven como los villanos de los cuentos. Por otra parte, el Profesor Mermelada, quien ha sido reconocido como el ciudadano más bueno, asegura que todos tenemos la flor de la bondad dentro de nosotros, y que solo se necesita sentir una corriente de positividad, "un cosquilleo de bondad", para querer sentirlos siempre. En este mismo sentido, el Profesor comenta que él hace el bien no para recibir un premio, sino porque "ser bueno se siente muy bien". ¿Pero qué tan bueno es el ciudadano más bueno, y qué tan malos son los tipos malos?
Cada uno de los tipos malos experimenta ese "cosquilleo de bondad" en diferentes momentos, que es esa sensación de bienestar que les producen los actos que buscan el bien común y no solo un beneficio individual. Por más pequeñas que parezcan esas buenas acciones, el impacto positivo que estas tienen en los demás y en ellos mismos es más que evidente. Si lo trasladamos a nuestro entorno, hacer el mayor bien posible nos hace sentir ese "cosquilleo de bondad" que nos impulsa a seguir actuando conforme a nuestros valores, sin importar en dónde, ni con quién.
Si bien al final el Profesor Mermelada resulta ser completamente opuesto a lo que aparenta, los tipos malos toman sus argumentos y enseñanzas, y los hacen propios. Se vuelven buenos, y como resultado, se hacen responsables de sus actos; aceptan que han cometido muchos robos y que por ello deben ir a prisión. Claro, cumplen su condena, y al ser libres de nuevo, eligen seguir haciendo el bien porque es lo correcto; se demuestran a sí mismos que ellos tienen el poder de decidir si quieren ser los héroes o villanos de los cuentos.
Esta película es una invitación a esforzarnos por hacer el mayor bien posible día con día, a ser empáticos con los demás, no dejarnos guiar por las apariencias, y a ser responsables por nuestras acciones, ya que buenas o malas, siempre habrá consecuencias y debemos afrontarlas. En resumen, es una invitación a actuar éticamente.
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